Para los que me conocéis de cerca o me seguís en varias redes sociales sabéis que además del eLearning y la formación, mi tiempo libre lo dedico a temas de DIY y al deporte.
Hace unos meses participé en un evento deportivo, XLETIX, y quería compartir con vosotros algunas de las lecciones aprendidas que una se lleva después de participar en un evento deportivo de este tipo.
¿Qué tiene que ver una carrera de obstáculos con la gestión de equipos?
Pues mucho en realidad. Una carrera de obstáculos es un bonita metáfora para describir el día a a día de trabajar con otras personas, de trabajar en equipo y de gestionarlas.
Participar en una carrera de obstáculos te enseña sobre los límites de uno mismo, del nivel de disciplina que tiene cada uno y del nivel de tolerancia sobre tus compañeros.
De todas las lecciones aprendidas resumo lo que aprendí de una carrera de obstáculos aplicado a la gestión de personas.
Lección 1. Objetivos y metas claras
En una carrera de obstáculos es muy importante visualizar la meta, pero más importante es el recorrido para llegar a ella.
Nuestro equipo lo tenía claro y era cumplir con los micro-objetivos de la semana que consistían en entrenamientos semanales y así poder soportar las duras pruebas que nos íbamos a encontrar el día de la carrera.
¿Qué puedo aplicar en la gestión de equipos?
- Al inicio de cada proyecto, durante el kick off del proyecto explica claramente a los miembros del equipo la meta, el “a dónde” queremos llegar y qué pasos hay que dar para poder llegar hasta ese punto.
- Enfatiza además la importancia de la implicación de cada uno para llegar a la meta del grupo.

Lección 2. Despertar el potencial y corregir las carencias
Cuando los miembros del equipo nos decidimos a participar en la carrera de obstáculos ninguno de nosotros había participado en ninguna previamente.
Sin embargo, reuníamos ciertas cualidades físicas que aventuraban que podríamos superarlo si centrábamos los esfuerzos en el potencial de cada uno, en corregir las carencias y si trabajábamos en grupo durante la carrera.
¿Qué puedo aplicar en la gestión de equipos?
Lo que aprendí de una carrera de obstáculos es que liderar equipos no es una tarea fácil. Encajar las piezas a veces puede ser igual que la de intentar montar un puzzle de 3000 piezas del cuadro de Guernica.
El gestor de equipos debe ser capaz de hacer tanto una DAFO individual por cada miembro así como una DAFO del grupo. En este sentido el gestor de equipos debe saber identificar el potencial y las carencias de cada persona, analizar cómo afecta al conjunto del equipo y establecer una estrategia que garantice conseguir los objetivos.
Lección 3. Competimos pero también nos ayudamos
Era una carrera de obstáculos: SI
Era una competición: SI.
Pero la organización fomentó antes, durante y después de la carrera la importancia de ayudarnos entre todos. No sólo a los miembros de nuestro equipo, sino ayudar a aquellos equipos que tenían dificultades en algún obstáculo. Porque el objetivo último de la carrera era, precisamente, que todos los participantes llegaran a la meta.
¿Qué puedo aplicar en la gestión de equipos?
Si conseguimos trabajadores implicados con sus equipos ¿por qué no fomentamos que los diferentes departamentos colaboren entre sí?
Dentro de una organización los departamentos comparten procesos y en ocasiones ciertas tareas tiene un impacto en el desempeño global de la empresa.
Si determinadas tareas o procesos tienen impacto en el desempeño de otros departamentos promovamos realizarlos correctamente para no afectar negativamente a otros equipos.
Lección 4. Fue duro pero valió la pena
Sólo tuvimos un margen de 3 meses para prepararnos la carrera y os puedo asegurar que fue duro. Teníamos claro que si queríamos llegar a los mínimos exigibles y llegar a la meta teníamos que poner una motivación extra. Os aseguro que había días en los que me dolía todo y quise tirar la toalla. Sin embargo, era tal nuestra motivación para llegar a la meta que no nos rendimos.
¿Qué puedo aplicar en la gestión de equipos?
Lo que aprendí de una carrera de obstáculos es la importancia de plantear los proyectos como un reto de grupo, de que el éxito o el fracaso del proyecto depende del esfuerzo de cada miembro y cómo lo realiza con el conjunto del grupo.
No obstante, el gestor del equipo debe tener las habilidades necesarias para motivar y dar un empuje en momentos de bajón.
Además, si queremos implicación por parte de nuestro equipo considero imprescindible ofrecer recompensas que tengan un significado para el equipo o un impacto en sus expectativas: tiempo para estar con la familia, teletrabajo, algún tipo de bonus, reconocimiento del trabajo bien hecho, ascensos, etc.
Existen infinidad de maneras de motivar y hacer partícipes a nuestros empleados en nuestra organización.
En resumen…
La gestión de equipos es tarea ardua pero no imposible y lo más satisfactorio es llegar a la meta gracias al granito de arena que cada uno ha invertido.
En cuanto a mi carrera de obstáculos particular, ¿Valió la pena? Sí. ¿Volvería a repetir? SI, SI, SI.
Por cierto, hicimos la distancia M unos 14km y 25 obstáculos y aunque hubo momentos en que creímos que no llegábamos, ahí estamos, cruzando la meta.
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